1- Lenguaje verbal
El lenguaje verbal se caracteriza por utilizar el lenguaje escrito u oral. Presenta un emisor - receptor - mensaje - contexto - canal - código.
Emisor: Es quien emite el mensaje, es decir, quien habla o escribe.
Receptor: Quien recibe el mensaje, es decir, quien escucha o lee.
Mensaje: Es el enunciado, lo que se trasmite desde el emisor al receptor, es decir, lo hablado o escrito, construido según un código lingüístico.
Código: Sistema de señales o signos que se usan para transmitir un mensaje, por ejemplo, el inglés, el castellano, el código morse.
Contexto situacional: Entorno donde se realiza la comunicación, ya sea el entorno físico o la situación (política, social, histórica o de otro tipo).
Contexto temático: Tema en torno al que se organiza la situación comunicativa.
Canal: Elemento físico que establece la conexión entre el emisor y el receptor. Soporte material por el que circula el mensaje.
Lenguaje No verbal
Difícilmente un emisor se mantendrá inmóvil al momento de entregar un mensaje, ya que tendrá la necesidad de moverse, gesticular o desplazarse dependiendo de la información que esté recibiendo. Al contrario, continuamente el cuerpo comunica por sí mismo sin necesidad de recurrir al lenguaje verbal consciente o inconscientemente.
De esta forma, el modo simbólico en la comunicación va a estar dado por los mensajes no verbales, que se caracterizan por ser subjetivos, individuales, emotivos y estéticos, dependiendo del emisor.
Así, la comunicación interpersonal, se va a producir por la interacción de los mensajes verbales y de los no verbales.
El lenguaje No verbal considera tres áreas importantes:
– Kinésica: se refiere a todos aquellos movimientos faciales y corporales, gestos o mímica (ceño, sonrisa, mueca, dirección de la mirada, postura de los brazos y piernas) que realizan tanto el emisor como el receptor de un mensaje en un acto comunicativo. Dichos movimientos y gestos van a depender del tipo de información que se entregue, de la emisión y recepción del mensaje, de la situación y el contexto.
– Proxémica: está relacionado, directamente, con la distancia, el contacto físico, posición y desplazamientos entre quienes participan del proceso comunicativo, quienes consciente o inconscientemente reaccionarán dependiendo de la relación con el hablante, de la situación y del contexto en que se dé el acto comunicativo.
– Icónica: apunta a todos aquellos símbolos o signos visuales, que son entendidos y habituales a una comunidad que entregan información. Por ejemplo: los símbolos del tránsito, el código morse, etc.
Clasificación de lenguaje no verbal
Kinésica:
Corresponde a los movimientos faciales y corporales.
Corresponde a los movimientos faciales y corporales.
Proxémica:
Se relaciona con la concepción, estructuración y el uso del espacio, relacionándolo con la distancia que se establece entre los participantes del proceso comunicativo.
Se relaciona con la concepción, estructuración y el uso del espacio, relacionándolo con la distancia que se establece entre los participantes del proceso comunicativo.
Icónica:
Incluye imágenes (representación gráfica del objeto), por ej: disco pare.
Incluye imágenes (representación gráfica del objeto), por ej: disco pare.
Señales:
Representación de un referente por un acuerdo social, por ej: negro/luto.
Lenguajes gráficos:
Lenguajes escritos que utilizan imágenes para representar la realidad, por ej. jeroglíficos.
Musical:
La música es otra manifestación de la comunicación no verbal. Las melodías no necesariamente deben ir acompañadas de una letra para crear un ambiente. Los efectos sonoros del rock, por ejemplo, transmiten una emoción muy diferente de los de una balada. Se usa la música para el cine, teatro y la televisión, reflejando estados anímicos.
La música es otra manifestación de la comunicación no verbal. Las melodías no necesariamente deben ir acompañadas de una letra para crear un ambiente. Los efectos sonoros del rock, por ejemplo, transmiten una emoción muy diferente de los de una balada. Se usa la música para el cine, teatro y la televisión, reflejando estados anímicos.
Lenguaje paraverbal
Se define como el uso, que hace el emisor de un mensaje, de entonaciones, ruidos (carraspeos, llanto) pausas, silencios, énfasis y variaciones de la voz (tono, volumen, ritmo) en un acto comunicativo.
Dichos elementos ayudan a otorgar un sentido y coherencia al mensaje verbal que se está entregando, aunque muchas veces no exista esta coherencia. Es ilógico que un receptor crea que el emisor está triste si éste se está riendo, por ejemplo.
La comunicación oral, no se concibe sin el paraverbal. Por el contrario, éste último habla por sí mismo.
Este tipo de lenguaje se caracteriza por favorecer la manifestación de emociones, sentimientos y actitudes del hablante.
El lenguaje paraverbal se compone de una serie de características que complementan al lenguaje verbal.
- El volumen
- El ritmo
- Tono de la voz
- Las repeticiones
- Enlaces
- Sonidos
- Silencios
- El volumen
- El ritmo
- Tono de la voz
- Las repeticiones
- Enlaces
- Sonidos
- Silencios
Influye en la regulación de la conversación, expresando la invitación a participar en ella a través de la elevación de tono al acabar el turno propio, en los silencios que instan al entrevistado a hablar, en mostrar deseo de intervenir, etc.
Elementos paraverbales
Los elementos paraverbales acompañan la expresión lingüística y entregan al receptor claves que van más allá de lo verbal, pero que lo complementan. Dichas claves posibilitan al oyente la interpretación del significado del mensaje con mayor precisión.
Los elementos paraverbales del lenguaje oral son la entonación, las pausas, los énfasis; es decir, aquellos recursos que nos permiten decir algo en tono de pregunta, de exclamación o de afirmación; en un tono irónico o no convencional; expresar un silencio o interrupción, indicar el cambio de turno de los interlocutores, etc.
Estos elementos del lenguaje paraverbal se traducen en su forma escrita en los signos de puntuación y entonación. Es así como usamos las comillas para indicar el sentido irónico o no convencional de una palabra; los puntos suspensivos para indicar pausas o frases incompletas, los guiones para indicar las intervenciones de los interlocutores, los signos de interrogación y exclamación para expresar preguntas y exclamaciones.
Funciones paraverbales
- Motivar al receptor.
- Permitir que el otro procese la información.
- Señalar un proceso comunicativo defectuoso( un silencio muy prolongado).
- Indicar el cambio de turno en los hablantes.
- Manifestar sentimientos o emociones.